La fascinación por la imaginaria tecnología que nos transporta al onírico mundo de las naves de guerra que pueden acelerar en fracción de segundos a varias veces la velocidad de la luz es para muchos una realidad a la que eventualmente los humanos podremos llegar y es con esa fe que los fanáticos hacen reales las proezas de los aventureros de la saga y se imaginan que ellos mismos o sus futuras generaciones podrán disfrutar de aventuras en nuevas y lejanas galaxias.
Si bien es cierto que pensar que esta clase de naves puedan existir en algún momento de la historia futura de nuestra raza humana es difícil de imaginar para muchas personas, las nuevas generaciones de fanáticos del universo expandido Star Wars lo consideran una realidad muy posible y no tan lejana, y es en ese convencimiento que los admiradores de la serie se convierten en verdaderos creyentes de esta nueva Fe llamada Universo Star Wars, para los cuales ser fanáticos de la saga es ser parte de una realidad alternativa pero muy real y compartida por otros millones de adherentes alrededor de nuestro planeta.
Naves Star Wars
Las naves de la película son un mundo aparte y digno de análisis por sí solo, las naves sin parangón como el ultra veloz Millenium Falcon, los cruceros espaciales del imperio, la nave insignia de la flota imperial donde el mismísimo emperador se traslada, llamada Terror es una gigantesca mole de 3 kilómetros de largo, es sin lugar a dudas una imponente ejemplar de la imaginación sin límites del creador de la saga, caso aparte es la estación espacial del tamaño de una luna, la poderosa Estrella de la Muerte, con la capacidad de destruir un planeta completo, borrarlo del espacio y hacerlo polvo es la nave-arma más impresionante que podemos ver en toda la primera trilogía original cuyas naves espaciales marcaron un antes y un después en la historia de la cinematografía mundial.